Preguntas frecuentes

Foto para preguntas frecuentes¿Qué es la Comunión Internacional de la Gracia y cuál es su misión?

La Comunión Internacional de la Gracia, es una iglesia nacional administrativamente, establecida y legalmente registrada en Madrid. Está ligada teológicamente a la Grace Communion International, con sede en Glendora, California. Tiene miembros en 120 países y jurisdicciones. La misión de la iglesia es proclamar el evangelio de Jesucristo alrededor del mundo y nutrir a los miembros en la vida cristiana (Mateo 28:12-20).

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¿Cómo se gobierna la iglesia?

Se constituyó legalmente en España el 7 de marzo del año 1990 y está inscrita en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia con el número 150-SG.

Se rige por sus Estatutos y su Junta Directiva Nacional, que aprueba su presupuesto anual y supervisa su ejecución y logros, por medio del director nacional, al amparo de los derechos reconocidos en la Constitución y en la Ley Orgánica de Libertad Religiosa de 5 de Julio de 1980.

Junta Directiva-JUN-2010

Cada congregación es dirigida y servida por su pastor o equipo pastoral, apoyado por el consejo consultor de la congregación. Otros líderes congregacionales, ancianos, diáconos, diaconisas y miembros laicos desempeñan papeles de liderazgo bajo el pastor, y son ordenados o designados por el pastor, con la aprobación del director nacional.

La administración denominacional es dirigida por el presidente y la Junta Directiva, aconsejados y respaldados por el consejo de ancianos. Una vez propuesto a la administración denominacional, por la Junta Directiva nacional, la denominación designa al director nacional como la autoridad eclesiástica en cada nación, quien a su vez designa y ordena a los pastores bajo su cuidado y supervisión, quienes le han sido propuestos por el liderazgo en cada congregación, después de que las ordenaciones han sido revisadas y aprobadas por la denominación.

¿Cómo está financiada la iglesia?

Los miembros de la iglesia y los colaboradores financian la obra del evangelio de nuestro ministerio por medio de sus diezmos y ofrendas dados voluntaria y libremente según son movidos por Dios en sus corazones. Estamos agradecidos a nuestros miembros y a nuestra familia de colaboradores por su generoso apoyo. Las finanzas de la Comunión Internacional de la Gracia, en conformidad con su responsabilidad de mayordomía y ética cristianas, son supervisadas periódicamente por la Junta Directiva. Para más información sobre cómo dar un donativo pincha aquí.

¿Quién puede asistir a sus servicios?

Cualquiera que esté sinceramente interesado en aprender más de Jesucristo y las buenas nuevas de salvación mediante la fe en él es bienvenido todos los domingos a nuestra celebración de gozosa alabanza a Dios, de aprendizaje de su Palabra y de comunión cristiana. Para información sobre lugares de reunión pincha aquí.

¿Tienen una congregación cerca de donde vivo?

La Comunión Internacional de la Gracia tiene pastores ordenados y congregaciones en muchas partes del mundo, como aquí en España. Es posible que tengamos una cerca de donde vives.

Si estás interesado en hablar con un pastor o en visitar una de nuestras congregaciones, por favor, para más información pincha aquí.

¿Qué enseña la Comunión Internacional de la Gracia sobre la evolución?

Enseñamos que el Dios de la Biblia es el Creador. Creemos en la declaración inspirada de Génesis 1:1: «En el principio Dios creó los cielos y la tierra». Creemos que Dios ha dado el registro científico para la instrucción y el conocimiento humano, y que no existe conflicto entre la Biblia y los descubrimientos científicos. Creemos que cuando la Biblia y los descubrimientos científicos aparentan estar en conflicto, aquella o los estos han sido mal interpretados. Por lo tanto, no negamos la evidencia científica que indica una larga historia de vida en este planeta, ni tampoco negamos que Dios pudo haber creado un proceso evolutivo para el desarrollo de las especies.

Creemos que sólo Dios puede crear vida, y que la Biblia no ha revela exactamente cómo lo hizo. Por lo tanto, si la evolución es verdad, creemos que Dios su autor.

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¿Qué enseña la Comunión Internacional de la Gracia sobre la homosexualidad?

La Biblia enseña que la práctica de comportamiento homosexual es un pecado, como se indica en prohibiciones bíblicas como Romanos 1:26-27 y 1 Corintios 6:9. Sin embargo, el comportamiento homosexual no es más, o menos, pecaminoso que cualquier otro pecado. Todos los pecadores son llamados a arrepentirse y a tener fe en Jesucristo. Todo pecador que viene a Jesucristo experimenta arrepentimiento y perdón y es limpiado de sus pecados por el Espíritu Santo.

Bajo la guía del Espíritu Santo, el homosexual convertido se aleja de su estilo de vida y entra en la nueva vida en Cristo. Esto no significa necesariamente que el homosexual se vuelve heterosexual. Significa que, por la gracia y el poder de Dios, él o ella deja de participar en actos homosexuales.

Los cristianos deben aceptar en su compañerismo a los homosexuales redimidos tal como aceptan a cualquier pecador perdonado, agradeciendo que Dios ha extendido su gracia y misericordia a todos los seres humanos sin excepción.

¿Cuál es vuestra posición sobre la distribución de condones para prevenir el SIDA?

Estamos de acuerdo con la Declaración de la Asociación Nacional de Evangélicos (NAE), (The NAE Statement of Clarification in the Global War Against HIV/AIDS – Declaración de la NAE de Clarificación en la Guerra Global contra el VIH/SIDA), que afirma:

Porque los evangélicos reconocen el poder de la naturaleza humana que reside dentro de todos los seres humanos, sentimos simpatía por aquellos que han tratado de reducir la diseminación del VIH/SIDA por medio de la distribución de preservativos. Sin embargo, aceptamos la triste realidad de que los preservativos, que han sido la piedra angular de los esfuerzos mundiales para luchar contra el SIDA, no han tenido éxito para reducir el número de muertes relacionadas con el SIDA o la diseminación de la infección por VIH. Como Edward Green, de la Escuela de Salud Pública de Harvard, informó al comité del Congreso sobre energía y comercio en marzo de 2003o: «…centrarse exclusivamente en el uso del preservativo no es una panacea para la prevención del VIH . . . La prevención del SIDA es en gran medida un problema de conducta que requiere una solución de conducta”. Los evangélicos, al mismo tiempo que celebramos la firma del acuerdo de prevención contra el SIDA más grande en la historia, destacamos que los recursos no serán gastados de la mejor forma si es solo para limitar las consecuencias de una conducta sin cambio, en lugar de hacerlo para motivar a las personas a abrazar la exhortación bíblica a encontrar la fuerza interior, a través del poder de Cristo para cambiar la vida, y a adoptar un estilo de vida que refleje el matrimonio bíblico y la disciplina sexual.

Más aún, reconocer esa verdad, puede llevar a cambios duraderos de la conducta por medio del ministerio del Espíritu Santo en las vidas de aquellos que se someten a Jesucristo. La NAE enfatiza que nuestra esperanza más grande para limitar la diseminación del VIH/SIDA descansa en la diseminación del mensaje dador de vida de Jesucristo. Creemos que los avances más significativos sobre el SIDA se harán a medida que ayudemos a las personas a abrazar la limpieza mental y emocional y el refrigerio que se encuentra en una relación personal con Dios.

La NAE recuerda a todos los ministros evangélicos que los esfuerzos naturales para reducir los efectos del vivir mundano serán muy limitados, pero que nuestro mensaje principal de la vida en Cristo, el poder del Espíritu Santo para cambiar los corazones, y la libertad que procede de la obediencia a Su Palabra es irreemplazable, y que es la forma principal por la que podemos mostrar compasión por el sufrimiento. Por ello, recordamos a todos los ministros evangélicos a expresar la compasión y el cariño más profundos a aquellos que están atrapados en las consecuencias naturales de sus acciones. La NAE se regocija y se une a los esfuerzos humanitarios alrededor del mundo para luchar contra esta enfermedad, y nos comprometemos a luchar contra el VIH/SIDA y sus consecuencias en las familias y en la comunidades a lo largo del mundo».

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¿Qué papeles de liderazgo desempeñan las mujeres en la Comunión Internacional de la Gracia?

La iglesia anima a las mujeres a contribuir en papeles de liderazgo de cualquier clase, incluyendo el ministerio pastoral ordenado. Hoy la Comunión Internacional de la Gracia tiene varias congregaciones con una mujer pastor al frente.

¿Qué enseñan sobre el aborto?

Enseñamos que bajo circunstancias normales el aborto no es una opción legítima, bíblica o ética y constituye pecado. Sin embargo, cuando la vida de la madre está en juego la iglesia considera el aborto una opción bíblica legítima.

Las decisiones de los miembros sobre el aborto en otras circunstancias extraordinarias, tales como la violación o el incesto, no se consideran una razón para apartarlos de la comunión. La iglesia reconoce la condición espiritual rota de los seres humanos, y llama a todos los pecadores al arrepentimiento, al perdón y a la redención en la sangre de Jesús.

Nuestra comunión no se involucra en movimientos políticos sobre este tema; la meta de la iglesia es llevar a las personas a Cristo, para que acepten la salvación y se arrepientan.

¿Qué enseña la Comunión Internacional de la Gracia sobre la participación política?

Enseñamos que votar y participar en actividades políticas es un asunto privado y personal.

Como cristianos, conocemos que «nuestra ciudadanía está en los cielos» (Filipenses 3:20). Sin embargo, aunque pertenecemos al reino celestial, y nuestra lealtad está ahí, vivimos aún en este mundo y debemos conducirnos como ciudadanos responsables. Ejercer el derecho al voto es una forma en la que los ciudadanos en países democráticos pueden participar significativamente en sus responsabilidades cívicas (Romanos 13:1, 7).

Ni nuestra iglesia en España, ni nuestra denominación participa en la política. Creemos que los cristianos deben respetar las opiniones y los sentimientos de los demás y, por lo tanto, no deben crear partidismo políticos dentro de la iglesia.

¿Qué enseñan sobre la guerra?

Creemos que la guerra debería de permanecer siempre como el último recurso. Sin embargo, de acuerdo a las enseñanzas del apóstol Pablo (Romanos 13:3-6), las naciones que se toman en serio el bienestar de sus ciudadanos deben actuar de una forma puntual y decisiva para detener a los malvados. Nuestra iglesia apoya la decisión de los miembros que son parte del ejército, y también de aquellos que son objetores de conciencia, ya que cada individuo deber tomar su propia decisión delante de Dios. Pedimos que Dios guíe a los líderes de todas las naciones para que todas las personas puedan vivir en paz y quietud (1 Timoteo 2:2).

¿Cómo ve la Comunión Internacional de la Gracia el prejuicio y la discriminación racial?

El prejuicio y la discriminación racial son anticristianos. Jesucristo enseñó que uno de los grandes mandamientos es amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Cuando le preguntaron: «¿Quién es mi prójimo?», Jesús respondió con una parábola ilustrando que toda persona es nuestro prójimo, sin discriminación (Lucas 10:29-37).

Dos niños africanos riendo-Bárbara M

El apóstol Pedro dijo: «En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia» (Hechos 10:34-35). Dios no tiene prejuicio racial. Pablo dijo: «Donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos» (Colosenses 3:11). Dios no mira la apariencia externa; él mira el corazón.

Los cristianos deben rechazar toda forma de racismo, intolerancia, prejuicio y odio. Los cristianos dan la bienvenida a la oportunidad de vivir en armonía con todas las razas. Las Escrituras enseñan: «Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano» (1 Juan 4:20-21).

¿Qué enseñan sobre el divorcio y nuevo matrimonio?

Nuestra iglesia sostiene la santidad del matrimonio y desaconseja el divorcio, pero siendo conscientes de que vivimos en un mundo roto, también reconocemos los matrimonios legales de personas anteriormente divorciadas.

¿Cómo ve la Comunión Internacional de la Gracia la glosolalia 0 el «hablar en lenguas»?

El Nuevo Testamento registra instancias en las cuales Dios concedió el don de hablar en lenguas a algunas personas en ciertas ocasiones para el propósito de promover la obra del evangelio.

En Hechos 2, por ejemplo, los apóstoles «fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen» (vers. 4). El hablar en lenguas hizo posible que la muchedumbre multinacional a escuchara el mensaje del evangelio en sus propios dialectos (vers. 6, 8, 11).

Pablo dijo que las lenguas y otros dones espirituales «los hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular, como él quiere» (1 Corintios 12:11).

Alguien podría preguntar: «¿Son aquellos que hablan en lenguas más espirituales o están más cerca de Dios que aquellos que no hablan en lenguas?» No necesariamente. Si aquellos que hablan en lenguas no tienen amor, Pablo dice que son ruido sin utilidad, no importa qué lengua hablen (1 Corintios 13:1). El don de lenguas, o cualquier otro don, no es una marca especial de espiritualidad. Todos los dones del Espíritu son dados como Dios decide. Nadie, sin importar que don posea, tiene ninguna razón para ser arrogante o sentir que es mejor que otros.

Pablo no prohibió hablar en leguas en la iglesia, pero dijo que «todo debía hacerse decentemente y con orden» (1 Corintios 14:40). Les enseñó a los corintios a no hacerlo durante sus reuniones, a menos que alguien pudiera interpretar. Aun si había intérpretes presentes, sólo una persona podía hablar a la vez.

Nuestro ministerio no cree que toda manifestación moderna de la glosolalia o discurso estático es inspirado por el Espíritu Santo.

¿Qué enseña la Comunión Internacional de la Gracia sobre el bautismo?

En el Día de Pentecostés, Pedro proclamó: «Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo, para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo» (Hechos 2:38). Los cristianos deben ser bautizados «en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo» (Mateo 28:19).

El bautismo en agua muestra y significa el arrepentimiento del creyente y la aceptación de Jesucristo como nuestro Señor y Salvador. El bautismo significa el compromiso con una nueva forma de vida en respuesta a Dios, al ejemplo de Jesucristo y la morada del Espíritu Santo. Nuestra práctica es el bautismo por inmersión, pero aceptamos los bautismos previos de los nuevos miembros, fueran realizados por inmersión o no.

¿Bautizamos a infantes?

Desde 1999 aceptamos como miembros a aquellos que fueron bautizados como infantes en otras iglesias. Esa decisión se basó en la evidencia de los frutos del Espíritu Santo en sus vidas. Porque ya son cristianos no necesitan otro bautismo. Cuando el bautismo de infantes se practica responsablemente en la comunidad de los fieles, puede verse como una señal de la generosa iniciativa de Dios, y como una poderosa expresión del hecho de que Dios nos amó desde mucho antes de que empezáramos a responder a ese amor.

Los ancianos de la iglesia pueden bautizar a un infante cuando es solicitado por sus padres o tutores. Tienen también la libertad de explicar estos principios a los padres o tutores y ofrecer el bautismo de infantes como una expresión de la gracia y el amor incondicionales de Dios. Tienen también la libertad para explicar los principios que tienen que ver con la bendición de los niños y el bautismo del creyente.

¿Que enseñáis sobre la comunión?

En la Cena del Señor los creyentes muestran y participan en la unión y comunión del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo y de todos los creyentes al participar del pan y el vino (o zumo de uva) en memoria de nuestro Salvador. Niños y miembros de otras denominaciones pueden participar si tienen fe en Jesucristo como su Señor y Salvador. En ocasiones nuestra ceremonia incluye el lavamiento de los pies.

¿Enseñáis el universalismo?

No. El universalismo no es una doctrina bíblica sana, que dice que al final todas las almas, ya sean humanas, angelicales o demoníacas serán salvas por la gracia de Dios. Algunos universalistas argumentan que el arrepentimiento hacia Dios y fe en Jesucristo son irrelevantes. Los universalistas típicamente niegan la doctrina de la Trinidad y muchos son unitarios.

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En contra del universalismo, la Biblia enseña que hay salvación solo en Jesucristo (Acts 4:12). En Jesucristo, que es el elegido de Dios por amor a nosotros, toda la humanidad es elegida, pero eso no significa necesariamente que todos los seres humanos aceptarán al final el don gratuito de Dios. Dios desea que todos vengan al arrepentimiento, y él ha creado una humanidad redimida para que tenga verdadera relación con él, pero la verdadera relación nunca puede ser forzada. Creemos que, en Cristo, Dios hizo provisión gratuita y justa para todos, incluso para aquellos que a la hora de la muerte parecen no haber creído en el evangelio todavía, pero todos los que permanezcan hostiles a Dios, permanecerán sin salvar por su propia elección.

¿ Creéis en los milagros?

Creemos que Dios, además de la maravilla más asombrosa de todas que es darnos la salvación gratuitamente por medio de Jesucristo, y de guiarnos a la la fe y al arrepentimiento, todavía hace milagros tales como sanar físicamente e intervenir en circunstancias físicas.

¿Qué son los ángeles?

Los ángeles son espíritus creados ministradores que sirven a Dios como mensajeros o agentes. Son designados para servir a aquellos que han aceptado la salvación, y acompañarán a Cristo en su retorno. Los ángeles desobedientes se llaman demonios, malos espíritus o espíritus impuros (Hebreos 1:14; Apocalipsis 1:1; 22:6; Mateo 25:31; 2 Pedro 2:4; Marcos 1:23; Mateo 10:1).

¿Quien es Satanás?

Satanás es un ángel caído que lidera las fuerzas malvadas en el mundo de esos espíritus. La Biblia se refiere a él con términos tales como el diablo, el adversario, el malvado, el asesino, el mentiroso, el ladrón, el tentador, el acusador de los hermanos, el príncipe de los demonios, el dios de este mundo. Está en rebelión constante contra Dios. Por medio de su influencia Satanás genera discordia, engaño y desobediencia entre los seres humanos. En Cristo, Satanás está ya derrotado, y su dominio e influencia como dios de este mundo cesará al regreso de Cristo (Lucas 10:18; Apocalipsis 12:9; 1 Pedro 5:8; Juan 8:44; Job 1:6-12; Zacarías 3:1-2; Apocalipsis 12:10; 2 Corintios 4:4; Apocalipsis 20:1-3; Hebreos 2:14; 1 Juan 3:8).

¿Cómo puedo saber por seguro que estoy salvo?

La Biblia afirma que todos aquellos cuya fe permanece en Jesucristo serán salvos, que «nada podrá arrebatarlos de sus mano». La Biblia enfatiza la fidelidad infinita del Señor, la suficiencia total de Jesucristo para nuestra salvación, el amor dinámico de Dios por todas las personas, y el evangelio como el poder de Dios para la salvación de todo el que cree. Teniendo tal seguridad de la salvación, a los creyentes se le urge a permanecer firmes en la fe y a crecer en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo (Juan 10:27-29; 2 Corintios 1:20-22; 2 Timoteo 1:9; 1 Corintios 15:2; Hebreos 6:4-6; Juan 3:16; Romanos 1:16; Hebreos 4:14; 2 Pedro 3:18).

¿Deben los cristianos guardar el mandamiento del sábado?

El sábado cristiano es la vida en Jesucristo, en quien cada creyente encuentra verdadero descanso. El séptimo día semanal, sábado, que fue unido a Israel en los Diez Mandamientos, era una sombra que prefiguraba la verdadera Realidad a quien señalaba: nuestro Señor y Salvador Jesucristo. No es requerido para los cristianos (Hebreos 4:3, 8-10; Mateo 11:28-30; Éxodo 20:8-11; Colosenses 2:16-17).

¿Qué es la justificación?

Las justificación es el acto generoso de Dios, en y por medio de Jesucristo, de declarar y establecer a un creyente como justo ante su presencia. Así, la humanidad experimenta el perdón divino y paz con su Salvador y Señor a través de la fe en Jesucristo (Romanos 3:21-31; 4:1-8; 5:1, 9; Gálatas 2:16).

¿Qué es la santificación?

La santificación es el acto generoso de Dios de imputar e impartir al creyente la justicia y santidad de Jesucristo. Se experimenta a través de la fe en Jesucristo, y se lleva a cabo por medio de la presencia del Espíritu Santo habitando en el creyente (Romanos 6:11; 1 Juan 1:8-9; Romanos 6:22; 2 Tesalonicenses 2:13; Gálatas 5:22-23).

¿Qué es la adoración?

La adoración es la respuesta a la gloria de Dios divinamente creada. Es motivada por el amor divino y surge de la revelación de Dios mismo en comunión con su creación. En la adoración, los creyentes tienen comunión con Dios el Padre por medio de Jesucristo a través del Espíritu Santo. La adoración conlleva dar a Dios la prioridad en todas las cosas humilde y gozosamente, y se expresa en acciones y actitudes tales como la oración, la celebración, la generosidad, con actos de misericordia y arrepentimiento (Juan 4:23; 1 Juan 4:19; Filipenses 2:5-11; 1 Pedro 2:9-10; Efesios 5:18-20; Colosenses 3:16-17; Romanos 5:8-11; 12:1; Hebreos 12:28; 13:15-16).

¿Debo preocuparme con la profecía bíblica?

No. La profecía bíblica nos muestra a Dios, su voluntad y propósito para la humanidad. En la profecía bíblica Dios declara que el pecado humano es perdonado a través del arrepentimiento y la fe en la obra salvadora de Jesucristo. La profecía proclama a Dios como Creador Soberano y Juez de todos, le segura a la humanidad su amor, misericordia y fidelidad, y motiva al creyente a vivir una vida de santidad en Jesucristo (Isaías 46:9-11; Lucas 24:44-48; Daniel 4:17; Judas 14-15; 2 Pedro 3:14).

¿Qué es el infierno?

El infierno es la separación espiritual de Dios elegida por los pecadores incorregibles. En el Nuevo Testamento, el infierno es mencionado con los siguientes términos: «lago de fuego», «las tinieblas,» y Gehenna (un precipicio a las afueras de Jerusalén donde se quemaba la basura). El infierno se caracteriza por el castigo, el tormento, la angustia, el llanto y el crujir de dientes y la destrucción eterna. Los términos bíblicos Seol y Hades, traducidos, a menudo, «infierno» o «el sepulcro», se refieren al mundo de los muertos (2 Tesalonicenses 1:8-9; Mateo 10:28; 25:41, 46; Apocalipsis 20:14-15; 21:8; Mateo 13:42; Salmos 49:14-15).

¿Qué es el cielo?

El cielo es un término bíblico aplicado al lugar elegido en el que Dios habita. Estar en el cielo es estar en Cristo en la presencia de Dios. Los creyentes están incluso ahora con Cristo en «los lugares celestiales». Cuando Cristo regrese traerá nuevos cielos y nueva tierra, caracterizados por el gozo eterno, paz y la justicia de Dios, y donde no habrá más muerte, ni tristeza, ni lloro ni dolor. Entonces el cielo estará en esa nueva tierra (1 Reyes 8:27-30; Deuteronomio 26:15; Mateo 6:9; Hechos 7:55-56; Juan 14:2-3; Efesios 2:5-7; Apocalipsis 21:3-4; 22:1-5; 2 Pedro 3:13).

¿Están los muertos conscientes o inconscientes con anterioridad al regreso de Jesucristo y la resurrección del cuerpo?

Los cristianos varían en su interpretación de pasajes bíblico relevantes, y nuestros miembros no son una excepción. Algunos pasajes parecen sugerir un estado inconsciente (ver Salmos 6:5; 13:3; 146:3-4; Eclesiastés 3:19-21; Juan 11:11-14; Hechos 13:36;), pero la evidencia en las Escrituras de alguna forma de estado consciente es también fuerte (ver Filipenses 1:21-24; 1 Tesalonicenses 4:13-14, Apocalipsis 6:9-11). Ciertamente, el cuerpo muere y decae, pero estos pasajes indican que el espíritu, o alma, de los creyentes parece estar consciente en la presencia de Dios. Cualquiera que sea el punto de vista correcto, hay una cosa que sabemos segura, los muertos están seguros en las manos de Dios y esperando la resurrección.

¿Que enseñan sobre el milenio?

El milenio es el periodo de tiempo descrito en el libro de Apocalipsis durante el que los cristianos mártires reinan con Jesucristo. Después del milenio, cuando todos los enemigos hayan sido puestos bajo sus pies, y le hayan sido sujetas todas las cosas, Cristo entregará el reino a Dios el Padre, y los cielos y la tierra serán hechos nuevos. Algunos tradiciones cristianas interpretan el milenio como 1000 años literales que anteceden (premilenialismo) o siguen (postmilenialismo) al regreso de Jesús, mientras que la mayoría de los cristianos creen que la evidencia de las escrituras señala a una interpretación figurativa (amilenialismo): un periodo de tiempo indeterminado que empezó con la resurrección de Jesús y concluirá con su regreso (Apocalipsis 20:1-15; 21:1, 5; Hechos 3:19-21; Apocalipsis 11:15; 1 Corintios 15:24-25).

¿Qué es la herencia de los creyentes?

La herencia de los creyentes es la salvación y la vida eterna en Cristo como hijos de Dios en comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. El Padre traslada a los creyentes, incluso ahora, al reino de su Hijo, y su herencia está reservada en el cielo para ser conferida en su plenitud a la segunda venida de Cristo. Los santos resucitados reinan con Cristo en el reino de Dios (1 Juan 3:1-2; 1 Juan 2:25; Romanos 8:16-21; Colosenses 1:13; Daniel 7:27; 1 Pedro 1:3-5; Apocalipsis 5:10).

¿Qué enseñan sobre el fin del mundo?

A su segunda venida, Jesucristo traerá juicio a las naciones y terminará la presente era de sufrimiento humano y confusión. Inaugurará la nueva era gloriosa de paz y felicidad eterna en los nuevos cielos y la nueva tierra.

¿Es necesario que los cristianos forme parte de una iglesia y asistan a los servicios de adoración?

Dios llama a los pecadores a la comunión con los santos, que es el cuerpo de Cristo. Independientemente de la denominación o elección de la congregación cristiana, la nutrición espiritual por medio de los compañeros cristianos es esencial para una vida fiel en Cristo. Es por medio de Cristo que «el cuerpo entero [es] concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente según la actividad propia de cada miembro» (Efesios 4:16).

Hablando de la importancia de la iglesia en las vidas de los cristianos, Pablo escribió: «Y él mismo [Cristo] constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo» (versículos 11-13).

La iglesia provee la estructura necesaria para la nutrición de cada miembro del cuerpo de Cristo. Trabajando juntos en unidad, la iglesia puede cumplir su responsabilidad hacia Cristo de predicar el evangelio y hacer discípulos.

Para información sobre congregaciones ve a información de contacto pinchando aquí.

Más información sobre las creencias y doctrinas de la iglesia está disponible en nuestra publicación Síntesis Doctrinal de la Comunión Internacional de la Gracia.

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